¿No tenéis curiosidad de si vuestro hijo es zurdo o diestro? La mayoría de papás y mamás que se interesan por el tema saben perfectamente que la parte derecha del cerebro, es decir el hemisferio derecho, es el responsable en mayor medida de la creatividad. MIentras que cuando hablamos del hemisferio izquierdo nos acercamos a todos aquellos aspectos qué tienen que ver con el razonamiento lógico el habla y la numeración.
La cuestión es más sencilla de lo que podría parecer. Se trata de una cuestión de dominación de áreas cerebrales. De tal manera que si tu niño o niña tiene el área cerebral dominante en el hemisferio derecho utilizara muchísimo más la parte izquierda del cuerpo y al revés.
Aquí hay que decir que hasta el tercer año de edad los niños y niñas utilizan de manera indistinta tanto la mano izquierda como la mano derecha con lo cual la lateralidad no se ha desarrollado por completo.
Es muy importante que respetemos y no forcemos la lateralidad en nuestros pequeños. Es decir debemos dejarles actuar de manera natural ya sean zurdos o diestros. Tan solo debemos actuar, apoyar una determinada lateralidad, en el caso en que ellos nos digan que no saben con qué mano actuar por ejemplo.
La tendencia DE ZURDO O DIESTRO se iniciará sobre los 3 años pero hasta los 6 o 7 no lo sabremos seguro
Como hemos comentado, se trata de una cuestión de dominancia de áreas cerebrales y de lateralidad. El cerebro se irá desarrollando desde el mismo nacimiento y alcanzará un cierto grado de madurez hacia el séptimo año de vida donde ya podremos decir que nuestro hijo es zurdo o más bien diestro.
ZURDO O DIESTRO: Observa la actividad de tu hijo a lo largo del día y podrás comprobarlo
Aquí la gran pregunta que surge es qué acciones son aquellas que debemos observar o evaluar para conseguir incluir si nuestro hijo va a ser zurdo o diestro. Entre las más comunes y significativas nos podemos encontrar con las siguientes.
- Área de deportes: Observa cuando tu hijo práctica de determinados deportes como el fútbol o el baloncesto, el tenis, el pádel y un largo etcétera cuál es la mano que utiliza para los gestos de precisión, Puedes pedirle también que haga esos mismos gestos con la otra mano y ver si es capaz de realizarlos de la misma manera.
- Utensilios de uso habitual en casa: por ejemplo observa con qué mano se suele cepillar los dientes, hacerse el pelo, cortar con tijeras o dibujar y escribir.
La dominancia con ojos oídos y pies
La dominancia en estas áreas es un poco particular ya que, por ejemplo puede haber niños que sean dominantes en un área determinada en estos aspectos y en cambio ser dominantes en la otra área para el resto de actividades por ejemplo las actividades realizadas con las manos.
Es decir puede ser por ejemplo zurdo a la hora de jugar a la pelota pero completamente diestro a la hora de escribir o bien dibujar. Es lo que técnicamente se llama lateralidad cruzada.
En este sentido hay que dejar meridianamente claro que la lateralidad cruzada no indica ningún tipo de trastorno ni sintomatología asociada, es total y absolutamente normal y evolutiva.
No debemos forzar al niño a realizar los movimientos de manera determinada
La implicación básica que se desprende de todo ello es que debemos dejar que nuestros pequeños y pequeñas desarrollen la lateralidad de manera natural. En tiempos pasados se portaba a los niños a escribir y dibujar siempre con la mano derecha.
Es decir si vemos que nuestro hijo o hija es zurda o fruto lo que debemos hacer como papás y mamas es ayudarle, apoyar a la hora de desenvolverse en la vida utilizando su lateralidad determinada
Se ha demostrado científicamente que forzar la lateralidad del niño puede llegar a provocar le gran cantidad de problemas a medida que se desarrolla, estos problemas se pueden presentar en distintas áreas como la lectura, la escritura, apareciendo problemas como la tartamudez o en muchos casos la dislexia
Evidentemente, de manera lógica se entiende, si forzamos a nuestros pequeños y pequeñas a actuar con su lado no dominante les estamos forzando actuar con el área cerebral más débil lo que les va a provocar también a nivel psicológico sensaciones de inseguridad y temor a la hora de actuar.
Se puede dar el caso de que algunos niños necesitan cierta ayuda, apoyo a la hora de fijar su lateralidad, si vemos que los profesores y nosotros como papás y mamás nos damos cuenta de que el niño no sabe muy bien con qué mano escribir o dibujar, por ejemplo, debemos ayudarle a definir su lateralidad pero hacerlo de modo moderado y nunca forzándolo, es decir dejando que al fin decida su propio instinto natural.
