La comunicación y el lenguaje en la etapa infantil son aspectos que suelen preocupar a los padres. El lenguaje es la forma o manera que tenemos de comunicarnos con nuestros semejantes. Puede adoptar distintas formas y el pequeño desde que es un bebé se comunica a través de sus llantos y gestos. Por tanto podemos decir que ya existe una primera comunicación.
En este punto inicial es muy importante darnos cuenta de que el lenguaje va a ser ese instrumento a través del cual se desarrollará como ser humano y expresará sentimientos emociones e ideas.
Lo que conocemos como habla es la expresión verbal de ese lenguaje se irá desarrollando de manera paulatina para ir avanzando a medida que vaya creciendo.
Como papás y mamás muchas veces estamos muy pendientes de ese desarrollo del lenguaje a través del habla y nos sentimos, en muchas ocasiones, preocupados por si se desarrollará de manera correcta o no.
En esta ocasión vamos a tratar de aportar luz en este tema, viendo cómo se desarrollan de manera normativa y evolutiva tanto la comunicación como el lenguaje.
Qué podemos hacer si esa comunicación y lenguaje no es el adecuado para la edad y pudiera ser algún tipo de trastorno de lenguaje.
Por último veremos qué recursos tenemos al alcance de nuestra mano para favorecer que esa primera comunicación sea evolutiva y se desarrolle por los cauces adecuados…
Las tres etapas o momentos críticos en la adquisición de la comunicación y el lenguaje en la etapa infantil.
Para facilitar la comprensión de lo que estamos hablando dividiremos la etapa infantil en tres periodos críticos en los que el niño va a presentar determinadas características en su comunicación y lenguaje normal.
- Primer año de vida: durante este primer año de vida, estos doce primeros meses básicamente el niño comienza a emitir sus primeros sonidos. Hacia los nueve o diez meses comienza a emitir algunas pequeñas palabras aunque no comprenda lo que significan.
- Del primer al segundo año de vida: en el intervalo que va del primer al segundo año de vida el niño comienza imitando sonidos y palabras que oye, de ahí la importancia de mantener un lenguaje correcto cuando nos comuniquemos con él
También es sumamente importante que como papás y mamás sepamos y entendamos que en esta etapa va a comenzar a adquirir su pequeño vocabulario de palabras. Además de iniciarse en el lenguaje corporal señalando partes de su cuerpo y objetos más habituales.
- Entre el segundo y el tercer año de vida: En esta etapa nuestro pequeño va a comenzar a incrementar sus intentos de comunicación tanto verbal como en su lenguaje corporal.
Comenzaremos en esta etapa a ver qué dice muchas más palabras y qué aumenta la comprensión hasta llegar a entender ya pequeñas clases y algunos verbos.
Señales que nos indican que algo no va bien ¿Cuándo debemos preocuparnos?
Como papás y mamás, siempre tenemos la preocupación sana de si nuestro pequeño o pequeña se está desarrollando de manera adecuada. Veamos una serie de señales que nos pueden poner alerta.
- Si el niño o niña tiene menos de un año y vemos que no obtenemos respuesta o no tiene reacción a los sonidos en general o no vocaliza ni balbucea.
- Si hablamos de pequeños y pequeñas entre uno y dos años de edad, deberemos verificar que comienzan a utilizar señales gestuales y han aprendido a despedirse diciendo adiós con la mano.
También es importante que veamos que a partir del año y medio empieza ya a imitar los sonidos que escucha tanto de fuentes externas como de sus propios padres.
Veamos que ya a partir del año y medio es capaz de entender cosas sencillas que le digamos.
- Si estamos hablando ya de pequeños de más de dos años de edad, han de ser capaces de utilizar ya pequeñas frases y palabras.
Hemos de ponernos alerta también si comprobamos que tiene una voz muy extraña o bien que no es capaz de comprender a sus amigos y niños de la misma edad.
Cuando esto sucede ¿Significa que mi hijo o hija tiene algo más grave?
Evidentemente lo primero que hemos de hacer es no alarmarse y acudir a un especialista, en trastornos de habla y lenguaje, que nuestros pequeños tengan dificultades o presenten cierto retraso a la hora de adquirir el habla y lenguaje no significa siempre que tengan un retraso en el desarrollo en general.
Las causas del retraso de la comunicación y el lenguaje pueden ser tanto fisiológicas como psicológicas.
Nuestros pequeños pueden tener un retraso en la adquisición de la comunicación y el lenguaje por ejemplo por problemas de audición. También puede suceder que no tengan un desarrollo correcto de lo que es la boca, la lengua o el paladar.
Debe quedar claro que en la mayoría de ocasiones un trastorno del lenguaje como hemos comentado no implica, sí o sí, un trastorno neurológico ni evolutivo del niño o niña.
En muchas ocasiones también los trastornos del lenguaje revelan trastornos de aprendizaje y se pueden tratar incluso en el mismo contexto educativo.
¿Cómo padres cómo debemos o podemos actuar?
Como padres hemos de saber que el desarrollo del lenguaje y la comunicación en la etapa infantil está muy ligado al entorno en el cual se desarrollan nuestros pequeños. No solo al entorno de la educación formal sino también al familiar.
Nos encontramos, como hemos visto en anteriores artículos, en una etapa en la que los pequeños aprenden muchísimo por observación, imitación y sobre todo estimulación sensorial.
Desde nuestra modesta experiencia os vamos a ofrecer una serie de tips o recomendaciones.
- Total y absolutamente básico e imprescindible: sacar tiempo para poder estar con nuestros pequeños y comunicarnos con ellos. Todo aquello que contribuya a incrementar su conocimiento de las palabras y el mundo que le rodea va a ser tremendamente positivo.
Los recursos educativos
Leerle cuentos, cantar con él canciones, ver vídeos adaptados para ellos, aprovechar todos los recursos que podamos para que vaya aprehendiendo del ambiente que le rodea.
- No hablar ni comunicarnos con nuestros pequeños de manera impulsiva o acelerada: es decir ellos necesitan de una comunicación directa y tranquila, plácida para poder imitar posteriormente todo aquello que están aprendiendo.
- Fomentar un entorno comprensivo de la realidad: Se trata de algo tan sencillo como que vayamos explicando para qué sirven las distintas cosas o porque hacemos determinadas tareas.
- Introducir el aprendizaje a través del contexto del juego: el niño necesita aprender, pero necesita aprender de manera lúdica, el juego cumple, como vimos, con esta función tan importante, siempre que podamos juguemos con él y aprendamos.
- Transmitirles mucha confianza: el aprendizaje y la comunicación requiere de un entorno confiable, nuestro pequeño o pequeña se expresará de manera adecuada si se encuentra tranquilo o tranquila para expresarse.
- Ser plenamente conscientes de lo que hacemos: este punto es muy importante, ya que hemos de ser conscientes de aquellas acciones que estamos realizando delante de los pequeños o pequeñas, de cómo las estamos realizando, ya que ellos perciben y aprenden como esponjas de nuestra propia realidad.
Tipos de juegos para fomentar y desarrollar la comunicación y el lenguaje infantil.
Como vimos el juego se convierte en el vínculo vehicular a través del cual, de manera lúdica y placentera, el niño va a comenzar a comprender, a expresarse a través de su comunicación y lenguaje.
Hemos querido finalizar este artículo presentando una serie de juegos, distintos tipos de juegos, que van a ayudar a que esto se produzca de manera correcta y evolutiva en nuestros pequeños.
Juegos de imaginación y construcción
La base de estos juegos es que favorecerá que se desarrolle de manera adecuada la coordinación motora y su percepción visual y espacial.
Los juegos de imaginación por su parte fomentarán muchísimo su creatividad tan importante en el futuro.
Especialmente interesantes para los pequeños son los libros con imágenes en los que hay poco o nada escrito y ello les motiva a imaginar las situaciones que van a suceder.
Te invitamos a que pases por nuestra sección de libros para niños a partir de 2 años dónde puedes encontrar todo tipo de libros infantiles que además de tenerles entretenidos y divertidos ayudarán a desarrollar una imaginación sana y constructiva.
Juegos mímicos y juegos de roles.
Se trata de juegos en los que se va a fomentar tanto la percepción del propio cuerpo que tiene el niño. Es la identidad de sí mismo, como la comprensión del entorno que le rodea y el desarrollo del pensamiento simbólico.
Juegos básicos a partir de los 3 años de edad, más o menos, que meten a los niños en situaciones cotidianas del día a día.
Ayudarán a que en el futuro nuestros pequeños y pequeñas sepan cómo enfrentarse a determinadas situaciones y qué hay que hacer para responder adecuadamente a cada una de ellas a través de los distintos roles.